Haití
El Consejo de Seguridad de la ONU suspendió ayer en el último momento una sesión extraordinaria que iba a dedicar a la crisis en Haití, con la que pretendía poner freno de algún modo al deterioro de seguridad que vive el país, agravado por un brote de cólera.
La reunión se había convocado a las 15.00 hora local (19.00 GMT) de forma inesperada esta misma mañana, pese a que a esa misma hora había otra programada para tratar la guerra en Somalia, pero minutos antes de celebrarse, fue suspendida y pospuesta hasta fecha no precisada.
Ya el embajador francés ante la ONU, Nicolas de Rivière, había dijo, al entrar a otra sesión del Consejo, que veía improbable que este miércoles se pudiera tratar alguna de las dos resoluciones sobre Haití, que actualmente se negocian entre bambalinas entre los miembros del Consejo.
La idea de las dos resoluciones separadas apareció el lunes, en otra reunión del Consejo sobre Haití: una para propiciar una intervención armada extranjera de apoyo a las fuerzas haitianas para retomar el control de grandes partes del país controladas por bandas delictivas, y otra para imponer una batería de sanciones a los responsables de la violencia, incluidos los líderes de las bandas.
Ya en la sesión del lunes aparecieron importantes divergencias sobre el fondo y la forma de ambas resoluciones, y tanto Rusia como China expresaron sus dudas sobre la conveniencia y la eficacia de ambas medidas.
ft. el caribe